A los lectores de TOP COMICS, tanto en esta -su versión tradicional- como en Facebook, nuestros mejores deseos para el año a punto de iniciarse, y muchas gracias por el apoyo prestado durante 2015.
GUSTAVO: una de nuestras grandes satisfacciones es que TOP COMICS se haya ocupado de él cuando pocos o nadie lo hacía. Por mail le pasaremos un dato que quizá pueda serle útil. Saludos
Hola. Con mucho placer y orgullo leí recién hoy los comentarios publicados hace tiempo ya sobre los trabajos de Avila. Se trata de mi tío, de quien hace ya bastante tiempo lamentablemente perdí contacto. Su nombre es Juan Luis Avila, a quien con mucho afecto llamaba Tio Negro. Inolvidables encuentros con el en su reducido cuarto, casi todo ocupado por su tablero de dibujo, siempre trabajando aún los fines de semana, con su plumín tinta china y hojas que, recuerdo inmensas brillosas y como con una pátina de cal que, explicaba, era para impresión (hoy se que era papel ilustración). Hermosos trabajos, con un sinnúmero de detalles que, a veces, apenas podían apreciarse en la publicación. Hombre serio, callado, muy afectuoso y trabajador, dibujaba día y noche en su sencillo cuarto, siempre acompañado por su perro Coqui. Recuerdo llevar a casa los ejemplares de todas las revistas Columba, que él me daba luego de retirarlas de la editorial, uno de los mejores recuerdos de mi infancia. Valga este homenaje a ese tío muy querido, del que perdí contacto hace ya largos años.
La madre de los cuatro últimos hijos de Victor Braxator les desea muy feliz año nuevo.
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Elida, muchas gracias y feliz año para usted también
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Gracias tocayo. Y que vos tengas un 2016 muy divertido. Carlos.
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GUSTAVO: una de nuestras grandes satisfacciones es que TOP COMICS se haya ocupado de él cuando pocos o nadie lo hacía. Por mail le pasaremos un dato que quizá pueda serle útil. Saludos
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Hola. Con mucho placer y orgullo leí recién hoy los comentarios publicados hace tiempo ya sobre los trabajos de Avila. Se trata de mi tío, de quien hace ya bastante tiempo lamentablemente perdí contacto. Su nombre es Juan Luis Avila, a quien con mucho afecto llamaba Tio Negro. Inolvidables encuentros con el en su reducido cuarto, casi todo ocupado por su tablero de dibujo, siempre trabajando aún los fines de semana, con su plumín tinta china y hojas que, recuerdo inmensas brillosas y como con una pátina de cal que, explicaba, era para impresión (hoy se que era papel ilustración). Hermosos trabajos, con un sinnúmero de detalles que, a veces, apenas podían apreciarse en la publicación. Hombre serio, callado, muy afectuoso y trabajador, dibujaba día y noche en su sencillo cuarto, siempre acompañado por su perro Coqui. Recuerdo llevar a casa los ejemplares de todas las revistas Columba, que él me daba luego de retirarlas de la editorial, uno de los mejores recuerdos de mi infancia. Valga este homenaje a ese tío muy querido, del que perdí contacto hace ya largos años.
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Carlos, muy feliz año para vos también. Este blog es una de las grandes cosas de la historieta argentina.
Abrazo y hasta el próximo post!
Julián Blas
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Muchas gracias Julian
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